Mi compañero Jesús |
Queridos amigos. Os presento al que fue mi compañero de trabajo Jesús Marchal Escalona, anestesista, sufre de Esclerosis Lateral Amiotrófica desde hace varios años. Está en fase muy avanzada y su testimonio es sobrecogedor. Recientemente fui a verlo a la UCI y no pude reprimir las lágrimas ante su bondadosa mirada... Él me decía con los ojos "esto se acaba pero quiero seguir agarrado a la vida"... Ahora respira mediante un respirador portátil a través de una traqueotomía y se alimenta mediante una sonda directamente al estomago (gastrostomía), ya no puede mover ni un dedo, no puede hablar, solo le quedan algunos músculos útiles para mover sus ojos y sonreír.
Trabajó conmigo en la Unidad de Dolor y Cuidados Paliativos del Complejo Hospitalario de Jaén y os puedo asegurar que fue y es un gran médico, una gran persona y un buen compañero. Él ha recibido dos balazos en estos últimos combates de una guerra perdida por la vida, aunque nunca se pierde la esperanza: uno en el cuello (la traqueostomía) gracias a la cual puede seguir respirando, otro en la barriga (gastrostomía) gracias a la cual puede seguir alimentándose. Detrás de él una fructífera e inagotable logística (su mujer e hijos) que lo cuidan de mil amores, los compañeros, la familia y los amigos, los voluntarios. En fin qué os voy a contar... querido Iván Castro, amigos de la VIII Bandera, amigos de nuestras Fuerzas Armadas, como veis héroes también los hay en la vida civil, en la vida diaria, y buena gente también. Vosotros lleváis el “detente bala”, mi compañero Jesús también lo lleva a su manera. Tomemos ejemplo los unos de los otros porque todos los días tenemos mucho de lo que aprender. Os dejo este testimonio que nos puede ayudar a valorar más las pequeñas cosas que nos ofrece la vida y además creo que es el mejor homenaje personal que puedo hacerle a mi compañero y amigo Jesús, y no es otro que el divulgar su heroísmo frente a la enfermedad, su ejemplo y sus valores.
¡Jesusete!, una vez más: ¡Un fuerte abrazo!
Alfonso Rojas Salcedo
PD: Jesús Marchal junto a su hermano Nicolás han escrito el libro “El ángel blanco” que edita EDICIONES ENDYMION, S. L. 91 522 22 10 ediendymion@yahoo.es , y que está a la venta. Es la historia de una importante batalla, la batalla contra la ELA.
YA
ESTOY DE NUEVO EN CASA
¡Gracias
a todos!
Han sido muchas las demostraciones de cariño recibidas durante mi estancia en el hospital. Muchas de ellas creo que son exageradas y se deben al amor que nos une.
En esta batalla contra la ELA en la uci del hospital he salido un poco mal parado con dos agujeros de bala: uno en el cuello (traqueostomía) y otro en la barriga (gastrostomía) además de dejarme muy débil. Por otro lado he descubierto algo que como médico no conocía: EL MIEDO. Pero es curioso como me recupero a pasos agigantados estando en casa con mi familia inflándome de besos, abrazos y cariños.
He sufrido y mucho, probablemente me preguntareis como estoy y yo os diré que estoy tranquilo y en paz. Puede parecer raro después de todo lo que he pasado pero la razón se la puedo copiar al padre Foucould:
Han sido muchas las demostraciones de cariño recibidas durante mi estancia en el hospital. Muchas de ellas creo que son exageradas y se deben al amor que nos une.
En esta batalla contra la ELA en la uci del hospital he salido un poco mal parado con dos agujeros de bala: uno en el cuello (traqueostomía) y otro en la barriga (gastrostomía) además de dejarme muy débil. Por otro lado he descubierto algo que como médico no conocía: EL MIEDO. Pero es curioso como me recupero a pasos agigantados estando en casa con mi familia inflándome de besos, abrazos y cariños.
He sufrido y mucho, probablemente me preguntareis como estoy y yo os diré que estoy tranquilo y en paz. Puede parecer raro después de todo lo que he pasado pero la razón se la puedo copiar al padre Foucould:
Padre,
me pongo en tus manos,
haz de mí lo que quieras:
sea lo que sea, te doy las gracias.
Estoy dispuesto a todo,
lo acepto todo, con tal que tu voluntad
se cumpla en mí y en todas tus criaturas.
No deseo nada más, Padre.
Te confío mi alma,
te la doy con todo el amor de que soy capaz,
porque te amo y necesito darme,
ponerme en tus manos sin medida,
con una infinita confianza,
porque tú eres mi Padre.
Por eso gracias a todos y espero seguir cogido de su mano ya que con Él encuentro la felicidad en medio de tanto sufrimiento.
Jesús
Marchal.
Ánimo Jesús, eres un ejemplo para todos.
ResponderEliminarTu amigo Antonio "el Sargento".
Jesús, la fe nos hace ver que el árbol de la felicidad tiene sus raíces en forma de cruz. Por tus palabras veo que dices como el beato Juan Pablo II: Si Cristo no se bajó de ella, ¿porqué habría de bajarme yo? A su intercesión encomiendo tu salud.
ResponderEliminarAunque no nos conocemos, un abrazo fuerte.
Eduardo.
Por nuestro común amigo Alfonso Rojas he conocido tu dolor, tu esperanza, tu fe y tu valor. ¡¡Gracias Jesús por tu ejemplo!! Héroes así tenemos que presentar al mundo por lo cercanos que estáis de nosotros, porque sois de carne y hueso y no imaginaciones de cuentos y porque vuestro ejemplo nos llena y nos admira.
ResponderEliminar¡Ánimo y como te has puesto en manos de Dios, no te quepa la menor duda de que Él te dará lo mejor y lo que más te conviene! Un abrazo fuerte y cariñoso de un desconocido para ti; pero que te admira y pide a Dios por ti. Fernando Gámez de la Blanca: Presidente de la Hermandad de Amigos de la Guardía Civil (HABeCu-Provincial. Sede de Úbeda).
solamente deciros que la página web para consultar las últimas novedades y reflexiones es: http://www.elangelblanco.es/
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